sábado, 28 de febrero de 2009
viernes, 27 de febrero de 2009
La alfombra roja
Para los que no lo sepáis, resulta que el día 31 de enero mi humano y mi humana celebraron su boda. De ahí que durante las dos primeras semanas de febrero nos tomásemos un descanso: ellos se fueron de viaje a Roma (ya os pondré algunas de las fotografías que han hecho en la Ciudad Eterna) y nosotros a pasar unos días en la casa de nuestros abuelitos humanos. Y ¿por qué os cuento esto? Podéis pensar, queridos lectores, que en el fondo soy un poco cotilla, evolución más que lógica de esa curiosidad propia de los felinos domésticos, pero en realidad todo esto tiene un motivo bien gatuno.

Anécdotas gatuneras a parte y a pesar de mi notable ausencia (pues preferí quedarme en casa para no robar protagonismo a los novios), sé de muy buena tinta que la ceremonia, el convite y los fastos fueron todo lo bien que tenían que ir. Y es que no podía ser de otra manera. A partir de ahora, tal y como dicen en los cuentos, seremos felices y comeremos perdices... O, mejor aún, marisquito rico, que si hay que pecar y saltarse la dieta prefiero unos buenos langostinos, unas sabrosas gambas rojas y unas cuantas cigalas... Aunque me temo que eso ya será otra historia (Ejem, ejem...)lunes, 23 de febrero de 2009
viernes, 20 de febrero de 2009
A mi burro le duele la garganta...
Algunos felinos (muy pocos) aceptarán de buen grado tomar sus medicinas. Otros muchos sucumbiremos en esta auténtica lucha en contra de la enfermedad, a pesar de nuestras uñas y nuestros dientes, aunque sin permitir jamás que nuestros humanos queden satisfechos al 100% (¿Se habrá tomado toda la pastilla? ¿Habrá escupido mucho jarabe?... ¡La duda es el precio justo a cambio de su triunfo!) Pero, a pesar de las dificultades y de alguna que otra dosis incompleta, es importante que una vez iniciado un tratamiento no lo dejemos a medias aunque pueda parecer que ya estamos bien: evitaremos de esta manera que se cree una resistencia al medicamento que podría pasarle factura a nuestra salud más adelante. Es duro, pero mientras los medios para curarnos se presenten bajo la forma de cápsulas, píldoras y brebajes varios, las batallas campales seguirán teniendo lugar en las casas con gato y la victoria, en este caso y por nuestro bien, debe estar del lado de nuestros humanos. Aunque eso no significa que se lo vayamos a poner fácil... Ejem, ejem...
martes, 17 de febrero de 2009
La toxoplasmosis
- "El mito de la toxoplasmosis y el embarazo", en Asociación Protectora de Animales y Plantas El Arca de Noé (Albacete) [Disponible el 17/02/2009 a las 18:10]
- "Toxoplasmosis: gatos y embarazadas", en En busca de una segunda oportunidad [Disponible el 17/02/2009 a las 18:15]
lunes, 16 de febrero de 2009
¿Eres parlanchín? Encuesta de febrero
- Soy gato y no digo ni miau. Para aquellos felinos que más bien parecen mudos.
- Soy gato y maúllo lo justo y necesario. Para aquellos michos que maúllan con moderación.
- Soy gato y maúllo por los codos. Para aquellos gatos que maúllan y maúllan sin parar.
- Soy perro y no digo ni guau. Para aquellos canes silenciosos en extremo.
- Soy perro y ladro lo normal. Para aquellos colegas perrunos que ladran lo necesario, ni más ni menos.
- Soy perro y ladro sin parar. Para aquellos cánidos que utilizan el ladrido constantemente: ¡Guau, guau, guau!
- Soy gato y ninguna de las anteriores.
- Soy perro y ninguna de las anteriores.
- No soy ni perro ni gato.
Resultados de la encuesta de enero
- Muy meditada: 10 votos (29,4%)
- Por sorpresa: 5 votos (14,7%)
- Una combinación de meditación y sorpresa: 16 votos (47,1%)
- Ninguna de las anteriores: 3 votos (8,8%)
La opción ganadora, con un total de 16 votos, ha sido la de aquellos humanos que se habían planteado la posibilidad de compartir sus vidas con un amiguete de cuatro patas pero a los que su llegada a casa les pilló por sorpresa. Lo que más nos ha gustado es comprobar que la mayoría de nuestros lectores de dos patas dedicaron algún tiempo a pensar en los cambios que impondría en sus vidas la convivencia con un animal, porque a la hora de asumir una opción como esta, lo que está en juego son vidas y sentimientos y no es una decisión que deba tomarse jamás a la ligera. También nos alegra saber que a los cinco participantes a los que les pilló completamente desprevenidos la llegada de su compañero peludo les haya ido bien. Y es que a veces las cosas son como son y no se puede hacer nada más que ser responsable y seguir adelante. De los tres participantes a los que no les cuadraba ninguna de las opciones anteriores, no podemos deciros nada más, puesto que no nos han dejado ningún comentario aclaratorio. Así que si se pasan por aquí y deciden desentrañar el misterio, estaremos encantados de leerlo.
domingo, 15 de febrero de 2009
¡Hemos vuelto!
martes, 3 de febrero de 2009
Nos tomamos un descanso...






Me llamo Rumbo y soy un gato urbanita que comparte sus experiencias cotidianas y sus reflexiones felinas con todo aquel que quiera leerlas. ¿Os animáis?







