Gatos efímeros: Fallas 2014 (2ª parte)

Gato sobre el tejado... Falla Mercado de Ruzafa.

A punto de escapársenos el mes de marzo y con eso de estar maullando por aquí y por allá aún nos quedaba como tarea pendiente el publicar la segunda parte de nuestro reportaje de las Fallas 2014. ¡Pues de hoy no pasa!

Menos mal que siempre vale más tarde que nunca y que tras publicar el primer grupo de gatos efímeros falleros por fin encontramos un ratito para compartir en nuestra Gatera, queridos lectores, los ninots felinos de este año rescatados vía foto que aún nos quedaban por mostrar. Comprobaréis que los hay de muchos tipos y en variadas actitudes y poses, que sus estilos cambian de un artista a otro, que algunos están solos y otros acompañados formando parte de grupos, pero que todos fueron (que ya no son) gatos desde la pintura hasta la médula de cartón. Esperamos como siempre que estas muestras de arte efímero os gusten, os entretengan y os "gatifiquen" el día y que os arranquen con su color y su gracia por lo menos una sonrisa (y quizá incluso dos)

Grupo con gatos. Falla Infantil Cuba-Literato Azorín.

Costurera con gatito negro. Falla Infantil Cuba-Literato Azorín.

Gatos borrachines. Falla Infantil Plaza del Coll.

¡Gatito en corazón! Falla Infantil Plaza del Negrito.

¡Linda gatita! Falla Almirante Cadarso-Conde Altea.

Gatito en avioneta. Falla Infantil Plaza del Mercado Central.

Gata Show Girls. Falla Joaquín Costa-Conde Altea.

Gatito equilibrista. Falla Infantil Joaquín Costa-Conde Altea.

Como podéis ver, el viaje de este año a Valencia mereció la pena por la cantidad y la calidad de los felinos que logramos inmortalizar. ¿Nuestro próximo reto fotográfico gatero y contrarreloj? En junio, las Hogueras de Alicante. Y recordad que aunque lo mejor de estas fiestas es disfrutarlas en vivo y en directo, nosotros os traeremos a nuestros rinconcito gatuno las escenas y figuras más felinas y que además este año os las tuitearemos a través de la etiqueta #CATninot desde nuestra cuenta de Twitter @congatos. ¿Os las vais a perder?

Una queja: Estos reportajes fotográficos son fruto de nuestra admiración sincera hacia una expresión de arte efímero que creemos que merece la pena reivindicar y que nosotros homenajeamos desinteresadamente a través de algunos de sus gatos. Pero lo cierto es que cada año nos ponen más difícil nuestro propósito y nuestra tarea a causa de las vallas que, unas por seguridad y otras por mero interés crematístico (ya que cobran entrada), limitan los monumentos, alejando en algunos cada vez más al espectador de los ninots y dificultando seriamente la toma de fotos. Y es que, cuando lo hay, el gato de cada conjunto, ironías de la vida, casi siempre queda en el lado oculto... En Fallas hemos tenido problemas y algún que otro reproche y nos tememos que en Hogueras tendremos más de lo mismo. Una pena, porque pensamos que lo importante en esto, como en muchas otras cosas, es compartir y lograr que más y más gente disfrute de la fiesta y de su arte. Y es que no sería este el primer caso en el que la avaricia y un exceso de celo mal entendido rompen el saco... Ojalá que ellos (los responsables falleros y fogueriles) sepan qué pretenden conseguir así...

¡Estamos de cumple pirata!

Pues eso, amigos y amigas: que este domingo en La Gatera estamos de cumple pirata. Nuestro pequeño Elmo se hace mayor y hoy celebramos sus cinco añazos. Y por eso, fieles a las tradiciones, esta mañana ha disfrutado de besos, abrazos y de su lata-tarta de pollo y jamón con velita y todo. Estaba tan rica que nos hemos puesto las botas y no hemos dejado ni las migas. Así que ahora, con la panza llena y relamiéndonos aún de gusto, toca disfrutar el resto del día con una buena y merecida siesta felina, que sumar años supone un gran esfuerzo para el que los cumple y también para los que lo celebran a su lado. ¿O no? Aunque eso no quita para que en la blogosfera continúe la fiesta. ¿Quién se anima a felicitar a nuestro pequeñajo a cambio de una porción del pastel virtual que más le guste? Eso sí, como somos gatos curiosos, queridos lectores, contadnos cuál es el sabor que elegís, que con una tarta vía blog todo vale y encima podemos permitirnos el lujo de saltarnos la dieta por un día.

Ya llegó la primavera...

Además de ripios flojos y de rimas fáciles, con la nueva estación llega también el momento perfecto para coger carrerilla y sacudirse de encima los últimos retazos del invierno. Así que a liberarse y que nada os detenga u os frene, que estrenamos una nueva fase llena de brillo y de color y tenemos desde hoy hasta el 21 de junio para sacarle todo el jugo porque:

"Ya llegó la primavera
quieras o no quieras.

Y la sangre nos altera

hasta en  La Gatera..."

Una etapa diferente y llena de vida y de proyectos que seguro que va a merecer la pena, muda intensa de pelaje felino aparte... (Ejem, ejem...) Y aquí estaremos nosotros para maullárosla y que nos la maulléis, queridos lectores, en este rinconcito gatuno que sin vosotros no sería lo mismo. ¿Os lo vais a perder?

Gatos efímeros: Fallas 2014 (1ª parte)

Gatito beige. F. I. Sevilla y Denia.

Si sois lectores desde hace tiempo ya sabréis que en La Gatera tenemos una afición: localizar, fotografiar y mostrar esos gatitos de cartón piedra que se instalan en algunas ciudades mediterráneas aunque sea por unos días, siendo ese el motivo por el que este año tampoco hemos querido perdernos las Fallas de Valencia: allí viajaron ayer los reporteros de nuestra Gatera (esto es, nuestros humanos) cámara en mano, para disfrutar por unas horas del ambiente festivo, del arte, de la luz y del color que invadirán las calles de la capital del Turia hasta la noche del 19 de marzo. Y vistas algunas de las fotos y de los ejemplares felinos retratados, os aseguramos que el madrugón, los kilómetros y que nosotros nos quedáramos solitos en casa unas cuantas horas merecieron la pena. Por eso os invitamos a que os desplacéis a disfrutar de los monumentos falleros in situ si tenéis posibilidad, que aún queda tiempo, o a disfrutar al menos virtualmente de algunos de los ninots más felinos que encontramos entre las Fallas 2014. ¿Cuál os gustará más?

Gato sastre. Falla Infantil Alta y Santo Tomás.

Gatito de Protección Civil. Falla Infantil Plaza del Ayuntamiento.

Gatita pirata. Falla Infantil Conde Salvatierra y Cirilo Amorós - Mercado de Colón.

A rayas y sonriente... Falla Infantil Bolsería y Tros Alt.

Gato bailando el hulahoop. Falla Infantil Cádiz y Literato Azorín.

Gato momia. Falla Infantil Matías Perelló y Luís Santángel.

Gato y caracol. Falla Infantil San Vicente y Periodista Azzati.

Pareja felina... Falla Infantil Ripalda y Sogueros.

Como veis, la primera parte de esta escapada fallera felina no tiene desperdicio y en unos días colgaremos el resto de fotos. Aunque no queremos despedir esta entrada sin hablaros de una novedad que hemos introducido este año: mientras nuestros humanos hacían su recorrido fotografiando ninots gatunos, tuitearon algunos detalles, creando la etiqueta #CATninot que mantendremos a partir de ahora cada vez que recorramos hogueras y fallas. Porque ser gatos bloggers es genial pero maullar en Twitter (allí somos @congatos) casi en vivo y en directo también tiene su gracia. ¿O no?

Leer, escuchar y sentir...

Hoy os proponemos, queridos lectores, esta metáfora de tristeza y de vacío hecha poema. Estamos seguros que la lectura de estos versos os tocará el corazón a todos los que lleguéis al final, seáis amantes de los gatos o no...

Un gato en un piso vacío.

Morir, eso no se le hace a un gato.
Porque ¿qué puede hacer un gato
en un piso vacío?
Trepar por las paredes.
Restregarse entre los muebles.
Parece que nada ha cambiado
y, sin embargo, ha cambiado.
Que nada se ha movido,
pero está descolocado.
Y por la noche la lámpara ya no se enciende.

Se oyen pasos en la escalera,
pero no son esos.
La mano que pone el pescado en el plato,
tampoco es aquella que lo ponía.

Hay algo aquí que no empieza
a la hora de siempre.
Hay algo que no ocurre
como debería.
Aquí había alguien que estaba y estaba,
que de repente se fue
e insistentemente no está.

Se ha buscado en todos los armarios.
Se ha recorrido la estantería.
Se ha husmeado debajo de la alfombra y se ha mirado.
Incluso se ha roto la prohibición
y se han desparramado los papeles.
¿Qué más se puede hacer?
Dormir y esperar.

¡Ya verá cuando regrese,
ya verá cuando aparezca!
Se va a enterar
de que eso no se le puede hacer a un gato.
Se irá hacia él
como si no quisiera,
despacito,
con las patas muy ofendidas.
Y nada de saltos ni maullidos al principio.

Wislawa Szymborska

Y por si alguien prefiere escucharlo, os dejamos el enlace al vídeo de la magnífica versión hecha por el grupo de poesía escénica Auralaria. ¡Cerrad los ojos y sentidlo!

¿Ronroneas o no? Encuesta felina de marzo.

Como muchos gateros ya sabréis, el ronroneo, ese sonido felino tan característico, aún hoy constituye un misterio para los estudiosos. No se sabe muy bien cómo se produce (vibración  de la vena cava, rápidos temblores de los músculos de la laringe,...) y tampoco exactamente qué significa: los gatos lo usan para expresar placidez, gustito y confort pero también para autoconsolarse cuando se encuentran mal, sienten miedo o incluso en los momentos antes de morir. El denominador común en todas estas situaciones parece ser el relax, lo cual se ajusta de maravilla a la popular frase atribuída a B. L. Diamond que dice que "Si hubiera que elegir un sonido universal para la paz, votaría por el ronroneo." Prrrrrrr...

Al hilo de este vibrante y peculiar ruidito hoy queremos plantearos, queridos lectores, otro enigma que esperamos que entre todos logremos resolver: ¿por qué algunos gatos NO ronronean? Este es por ejemplo el caso de Ramsés, uno de los gatos de nuestra amiga Lídia del blog Cafés en Solitario al que podéis admirar descansando a pata suelta en la imagen que ilustra esta entrada. Según su humana, se trata de un gato bueno, generoso, pacífico y juguetón pero jamás le han escuchado ronronear y les gustaría saber a qué se debe este silencio. Y no se trata de un caso único, no vayáis a pensar, que entre los gatos que ronronean tan bajito que no se les escucha y los que no lo hacen en absoluto, forman un grupo callado y discreto bastante nutrido...

Planteada la cuestión y ya que nos toca publicar nueva encuesta, se nos ha ocurrido que puestos en harina, la consulta para gatos de marzo no podía ocuparse de ninguna otra cosa. Y así, la pregunta que os proponemos en esta ocasión es la siguiente: ¿Ronroneas? Y las respuestas entre las que podréis elegir las vuestras son las siguientes:

• Sí, para los que ronroneen a todas horas, de vez en cuando, fuerte, bajito, dulcemente, cual el motor de un trailer o de forma prácticamente imperceptible. Sea cómo sea y cuánto sea, lo que importa es que SÍ lo hagáis.
• No, para aquellos que no lo hagáis NUNCA JAMÁS.

Ánimo a todos, que esta vez simplificamos la cosa al máximo para facilitar la participación: o sí o no. ¿Cuál es vuestro caso? Como siempre, agradeceremos además de los votos recogidos en el cuestionario (disponible hasta el último día del mes en la columna de la derecha) que nos comentéis experiencias, casos y anécdotas sobre ronroneos vía comentarios, que siempre nos gusta leeros y nos hace vibrar de gusto. Prrrrrrr... Y de paso esta vez, vamos a tratar de ayudar a Lídia con nuestros consejos, que entre todos seguro que aclaramos el misterio del mutismo de Ramsés. Aunque permitidnos indicar que en nuestra opinión alguien que duerme con poses como las de la fotografía, de preocupaciones pocas, ¿eh? ¿Alguna sugerencia?

Resultados de la amorosa encuesta de febrero...

¡Vamos, vamos, vamos! ¡Que al final va a resultar que los gatos estamos en el mundo para que nos achuchen! Y es que, vistos y contabilizados los votos de nuestra encuesta de febrero, parece que la mayoría coincidimos en que (y conste que me incluyo, ¿eh?) nuestros humanos son unos sobones que nos achuchan de más. Amparado en la experiencia propia, ya me imaginaba yo algo así, que nuestros humanos se pasan el rato abrazándonos, cogiéndonos y apretujándonos. Pero tampoco nada que sea insoportable, que con los años han aprendido a leer nuestras señales y a no agobiarnos de más. Sea como sea, podemos consolarnos como tontos pensando que esto de los arrumacos y los mimos es mal de muchos al ver ese casi 60% de lectores que confiesan que sus humanos les achuchan demasiado. Como siempre, pasamos a anotar el recuento de votos tal cual quedó al cerrarse la encuesta para que vosotros mismos podáis sacar vuestras propias conclusiones:

¿Tus humanos te achuchan de más?

- ¡Demasiado!, 11 votos (57,9%)

- Lo normal..., 4 votos (21%)

- Más bien poco, 1 voto (5,3%)

- No me dejo, 3 votos (15,8%)

- No me achuchan, 0 votos.

- Ninguna de las anteriores, 0 votos.

Achuchones aparte, mil gracias a todos los participantes que con vuestros votos habéis hecho posible que hoy estemos publicando estos resultados. Ronroneos cariñosos para María de Minino y Ary, Fidel con Merlina, Opiniones Incorrectas con Ferny, Perfi y Grace, Carmen y Dina, Lídia con Luna, Ramsés, Stevie y Fede, Manderley con Guindilla, Canela e Indi, Maggie con Pamino, Midori y Oliver, Gema con Minerva, Estrellita, Apolo, Sirio y Yunus, Anónimo con Wilsi, Luisa con Carlitos y Renato... Porque todos y cada uno conseguís pintarnos una sonrisa con vuestras ocurrencias y merecéis una paticaricia, un gaticariño y un besote felino. Aunque permitid que en esta ocasión reservemos nuestro abrazo más apretado y gatuno para la familia de nuestro colega canino Dark, que el último día de febrero cerró los ojitos para no despertar y ahora corre feliz en la tierra mágica del arcoiris: estamos seguros de que partió lleno de besos, de caricias y de amor, un bagaje de viaje que no pesa y nunca, jamás, es demasiado... ¡Ciao, amigo! ¡Espéranos que en la blogosfera del cielo volveremos a encontrarnos!

Happy birthday, querida Noa.

La niña felina de nuestro blog cumple hoy años, llegando por fin a una edad que la convierte en toda una veterana en esto de cumplir pero sin sumar tantos como para querer empezar a restar... Por eso y porque ella se lo merece dedicamos esta entrada y los piropos de este lunes 3 de marzo en La Gatera a nuestra pequeña reina de las nieves. Y es que, aunque la cifra exacta deba quedar envuelta en un halo de misterio al tratarse de una dama gatuna, no debemos olvidar que cumpleaños solamente hay uno al año y sería imperdonable no disfrutarlo.

¡Felicidades, chiquitaja! Porque aunque el tiempo pase siempre serás la pequeña de nuestros ojos...