La tentación está arriba... |
Y es que, cuando se vive a dieta por ser anchito de huesos, el pienso de los demás huele tan bien y seguro que es tan sabroso... ¿Cómo resistirse a desearlo? Mmmmmm... Si no fuera porque mi humano está ahí sacándome una foto podría subir y... Ains, ¡qué cruz tener un reportero a todas horas detrás de uno! Pero mirar no gasta y soñar es gratis... ¡Quién fuera el dueño de ese cuenco!
¡Ronroneos y que paséis un abrigado fin de semana, queridos lectores!
Tranquilo Rumbo, a algunos nos cuesta un poco más que a otros deshacernos de esos kilitos de las navidades… Pero bueno, aunque mirar no engorda, ¡qué mala leche ponerte la tentación tan cerca!
ResponderEliminarPor cierto acaba de empezar el mes y ya tienes más de 60 votos ¡qué extinto! Si es que el tema de este mes nos toca la fibra a más de uno… jejejejeje
Hola, Elena. Gracias por el apoyo, aunque no es mala leche. Es que Noa y Elmo comen ahí arriba para que yo no pille con facilidad sus comederos, que si los pusieran en el suelo... Ya me entiendes, que soy silencioso y rápido como un ninja, un poco redondo como Kung Fu Panda, pero ninja al fin y al cabo...
EliminarEn cuanto a lo de los votos, en casa pensamos que ha sido un error del formulario de encuesta (que en Blogger hay duendes y a veces nos juegan malas pasadas...) Ojalá fuera un éxito tan abrumador, pero me temo que son demasiados tiquis en comparación con todoterrenos, ¿no crees?
¡Ronroneos y gracias por pasar y apoyar!
¡Joeeeee! ¡¡Pues que mala leche los duendes!! yo que me había hecho ilusión de que había sido un éxito…
Eliminar¡Ánimo con la dieta Rumbo!
jajjajajaj que foto tan buena, y que idea tan buena, a Fede tendré que ponérsela más arriba todavía !!!!!
ResponderEliminarRonroneos gatunos y feliz semana.
Pues sí, Lídia. Si alguno de los gatos está a dieta es mejor buscar sitios separados para comer. Y Noa y Elmo comen en alto para que si me subo a comer su pienso mis humanos se percaten de mi jugada y frustren mis intenciones... ¿Has visto qué malotes que son conmigo? En fin...
Eliminar¡Ronroneos, guapa, y felicísima semana!
Si es que los humanos somos más malos... Mi técnica es más maléfica todavía: Apolo come solito y con la puerta cerrada en la cocina para evitar escapadas al plato equivocado. Creo que no hace falta que te describa los maullidos desesperados a uno y otro lado de la puerta durante el escaso minuto y medio que dura el encierro...
ResponderEliminarTranquila, que nos hacemos una idea... Ains, humanos ¡mira que sois malos!
EliminarRonroneos, Apolito, yo te comprendo... ¡Solidaridad, hermano!