Flores

Que Elmo es travieso y un pelín hiperactivo es algo que suponemos que ya saben los seguidores de nuestra Gatera. Pero a lo mejor lo que aún no hemos contado es que al pequeño rubiales le encantan las flores.

Combinar su carácter travieso con alguna que otra flor tiene como resultado algún susto puntual (como cuando hace unas semanas se comió la flor de un cáctus de Navidad...) pero sobre todo simpáticos momentos como el que la cámara de nuestra humana logró inmortalizar hace un par de días en casa. Y que conste que en esta ocasión casi las pilla aunque, por suerte, ninguna flor resultó dañada mientras se captaba esta imagen.