No vamos a negarlo: en el mundo hay muchísimas personas que adoran a los gatos. No en vano, somos a fecha de hoy la mascota que más crece en los hogares al tiempo que los indiscutibles reyes de la red. Hay gatitos en internet, gatitos en la ropa, gatitos en la tele, gatitos en los cómics, gatitos en los sellos, gatitos en los monederos, gatitos en las toallas, gatitos en el champú, gatitos hasta en la sopa y a muchos humanos esta gatunización generalizada les encanta porque ellos y ellas son unos amantes de los gatos o catlovers de los pies a la cabeza. Visto esto y dando por hecho que la mayoría de vosotros, queridos lectores, sois unos enamorados de lo felino, que si estáis aquí por algo será, nuestra duda gatuna y existencial en esta vuelta al cole es si un catlover nace o se hace. Y para descubrirlo necesitamos vuestra ayuda y que cada uno nos cuente su caso. ¿Os han encantado los gatos casi desde antes de nacer o vuestro romance con lo gatuno comenzó ya con cierta edad? ¿Fue un flechazo de los gordos o un ronroneante enamoramiento lento y tranquilo? Así, la pregunta que os planteamos este mes es la siguiente: ¿Un catlover nace o se hace? Y las respuestas entre las que podréis elegir las vuestras son las siguientes:
- Nace. Para aquellos que hayáis amado a los gatos desde antes de tener uso de razón y para aquellos para los que ser gatero sea toda una forma de vida.
- Se hace. Para los que hayáis sido atraídos por el lado felino más mayores, enamorados de algún gato concreto que quizá os robó el corazón.
- No soy catlover. Que de todo hay en la vida...
Fácil, ¿no? Pensad en vuestras historias y sentimientos y participad con vuestro voto. Y si os apetece explayaros y compartir vuestra experiencia, no dejéis de comentar, que nos encanta leeros y aprender un poco más cada día de este mundo felino que tanto nos gusta. Como siempre, el cuestionario estará colgado en la columna de la derecha hasta el último día del mes, así que id pasando a opinar sin prisa pero sin pausa, que cuantos más seamos más ineteresantes serán los resultados. Y puesto que se trata de compartir y por si sentís curiosidad, aquí nuestra humana dice que ella nació así, ailurofílica (que es el término formal que define a los amantes de los gatos) o catlover perdida. Y digo yo: ¿acaso alguien lo dudaba? Pues eso. ¿Quién más se anima?
Me llamo Rumbo y soy un gato urbanita que comparte sus experiencias cotidianas y sus reflexiones felinas con todo aquel que quiera leerlas. ¿Os animáis?
Yo diría nace porque he nacido catlover, pero conociendo a mi amiga Luisa, la madre de Carlitos, que no lo fue hasta que con 30 y pico tuvo a Efi y se volvió la gatera más gatera de todos los tiempos... también se hace. Siempre puede haber un catlover dormido dentro de ti.
ResponderEliminarSuponemos que hay de todo, como en botica: unos nacemos, otros se hacen un buen día... Cada caso es un mundo ;)
Eliminar¡Gracias por participar y miau, catlover de pura cepa!
Yo he nacido catlover , aunk creo que tb se hace viendo a mi novio que desconocía el mundo gato y ahora es tan catlover como yo ,a siquiera e creo que las dos cosas
ResponderEliminarEntonces un voto doble, María: nace, por ti, y se hace, por tu novio. Aunque yo creo que todos los que se hacen en realidad llevaban un catlover dentro desde que nacieron, lo que pasa es que no lo sabían...
Eliminar¡Ronroneos y gracias!
Hola, ya sabéis algo de mi, pero voy a extenderme más.
ResponderEliminarCrecí oyendo a mi madre que los gatos eran muy suyos, ariscos y esa cosas que algunos piensan...y que de tener animales nada que luego se sufría mucho cuando les pasaba algo. Yo quería un perro, un hamster, algo con pelo...
A los 15, se fueron un finde y cuando volvieron "mi Blacky" les recibió... pues como reciben los perros a su familia. Les había metido en casa un perrito abandonado que me acompañaba al insti y me esperaba siempre en la escalera. Hay empecé a ser animalera a fondo.
Luego entré en el mundo de los pajaros,( el de las aves libres).
Hasta que caí en un camping habitado casi solo por gatos donde inicié una gran amistad con Cieguito, la madre de Efi, bueno y con muchos más, ese fue el comienzo de mi carrera en picado y sin freno, hacia la locura gatera.
PD: Blacky fue el primer "nieto" de mi padres, le quisieron consintieron y lloraron, como a ningún otro.
He hecho un comentario, mas grande que vuestra entrada ¡que bochorno!
EliminarPero qué historia más bonita, Luisa. La de una catlover que lo era pero fue despertando poco a poco. Impresionante debió ser la cara de tus padres cuando vieron saltar a Blacky hacia ellos para recibirles ;)
EliminarRonrones, guapísima, y no te abochornes por hacer un comentario largo, que a nosotros nos encantan.
Miau.
PD. ¿Cieguito era la mami de Efi?
Sí la misma. Por si quereis conocerla.
Eliminarhttp://efigenita.blogspot.com.es/2011/05/dos-madres-la-gatuna-y-la-humana.html
Qué recuerdos más bonitos y qué entrañable es volver a leer a Efi: es un poco como si siguiera aquí abajo, en la Tierra, con nosotros.
EliminarGracias por el enlace, Carlitos. Nos llenaste de emociones de las buenas :)
En mi caso yo nací catlover pues a mi mamá también le encantan y desde que tengo uso de razón es lo que he visto en mi casa, en las épocas que no hemos tenido gatos en casa al menos teníamos algún "ahijado".
ResponderEliminarDespués me casé con un catlover y nuestra hija también lo es, así que parece que lo nuestro es genético jaja
!!Cariños y ronroneos a todos!!
Eso de llevar a un catlover en los genes (o, como solía decirse antes, en la sangre) queda de categoría, querida Carmen. Y nos encanta que sea una actitud que se transmite de padres a hijos porque ahí está el futuro.
Eliminar¡Miau-gracias y ronroneos!
Ohhh o no nací Catlover, me hice Catlover de mayorcita a los 25 años cuando me trajeron sin preguntar a casa mi primera gatita Isis, y apartir de entonces, soy Catlover Forever, que más vale tarde que nunca !!!!
ResponderEliminarBesos y Ronroneos !!!!
Cierto, querida Lídia: más vale tarde que nunca y es todo un placer contar contigo en nuestras filas felinas. Ronroneos a Isis, que te convirtió ;)
Eliminar¡Saludetes y gracias!
No se si soy Gatlover o me hice a base de tener siempre gatos en mi casa. Pero me encantan los gatos desde que me acuerdo.
ResponderEliminarNos encanta eso de Gatolover, queda muy bien. En cuanto a lo de querer a los gatos desde que tienes uso de razón, pues sí, como contaba Carmen es que hay humanos que lleváis lo felino en la sangre ;)
Eliminar¡Ronrones, Anónimo! Y gracias por comentar.
Yo nací siendo bicholover y ya de mayor me especialicé en los felinos gracias a Apolo y compañía.
ResponderEliminarMi peluche favorito de todos los tiempos fue y es Tristón, un perro que sale en TODAS mis fotos de pequeña. De hecho, Tristón y su omnipresencia es un tema recurrente y jocoso en todas las comidas familiares...
Y ahora, como bien sabéis... ¡¡catlover a muelte!!
Una bicholover de nacimiento especializada en gatos. Mmmm... Eso es un título chulo y no los que tienen algunos que presumen por ahí :)
EliminarLo del perrete Tristón es otra historia, pero nos encanta conocerla (y si hay fotos, a ver si las enseñas...)
Ronroneos, Gema. Y a querer gatos ¡a muerte!
¡Hola!
ResponderEliminarEn mi caso, a mí siempre me han gustado los animales, lo que pasa que al vivir en un piso relativamente pequeño en la ciudad, mis padres nunca me habían dejado tener más allá de peces, tortugas o pájaros. Ésto fue así hasta que conocí a Rinoa y me robó el corazón, la traje a casa con 10 días y desde entonces nos hemos vuelto inseparables.
Supongo que en mi caso, nace y se termina haciendo con la edad y la experiencia, porque a mi pequeña no la cambio por nada del mundo :-)
¡Un besoteeee!
Ains, esa Rinoa robacorazones que te trajo al lado felino de la vida, ¡un monumento para ella y dulces ronroneos para ti, Cintilla, catlover que nació y terminó haciéndose con los años!
EliminarMiau ;)
En mi caso, mi locura gatuna ha sido relativamente reciente, unos 7 años. Aunque debo reconocer que he amado a los gatos mucho antes de poder tener el privilegio de compartir mi vida con uno. Por desgracia tuve una familia que no amaba a nadie, ni siquiera a los animales, y hasta que no he tenido mi lugar propio para vivir, no he podido tener un animalito conmigo. Pero desde que mi peque entró en mi casa y mi corazón, me ha vuelto totalmente tarumba.
ResponderEliminarLo que siempre he tenido es un amor generalizado por los animales, siempre he comprado artículos solidarios, he alimentado a animalitos abandonados, he apoyado causas, y los he amado con fuerza.
Entre todas las locas gatunas cambiaremos este mundo.
Un abrazo
Reme
¡Loca por los gatos! ¡Esa es una gran presentación, Reme!
EliminarEstamos encantados de leer estas historias que son las vuestras pero al mismo tiempo las de muchos lectores, porque lo que vamos comprobando es que los catlovers que no lo son desde peques suelen ser amantes de los animales en general que un buen día se pasan al lado felino y esto suele ser mérito de un gato ;)
Abrazos peludos, amiga, y gracias por compartir tu historia.
¡Ronroneos!
Pues la verdad es que si me dicen hace diez años que iba terminar como loca de los gatos ni me lo creo...
ResponderEliminarMi familia y amigos todos son perrunos, lo único que me llegó sobre los gatos de pequeña son los típicos prejuicios que eran ariscos, aburridos... etc.
El primer contacto que tuve fué de lo menos afortunado, fueron dos hermanitas que me pidieron que acogiera hasta su adopción, cuando intenté cogerlas (yo no tenía ni idea de como tratarlas) me echaron los brazos abajo a mordiscos y se fueron de casa adoptadas sin que consiguiera hacerme amiga de ellas :(
Fué cuando acogí y después adopté a mi primera gata, Dora, cuando empecé a comprender el mundo de los felinos y desde entonces me convertí en catlover.
Siempre hay un primer gato para todo catlover (aunque, como en tu caso, no sea el primero) Con este galimatías quiero decir que Dora fue tu primer amor felino a pesar del desencuentro con las dos hermanitas acogidas... Menos mal que la primera impresión no fue la que contó en tu vida.
EliminarRonroneos, Kira, y gracias por contarnos tu historia, la de una amante de los gatos que se hizo contra viento y marea (y a pesar de los arañazos y mordiscos)
Mi historia es rara XD
ResponderEliminaryo más que una catlover soy una animalover. Mis padres odian a los gatos, aunque dicen que los míos son muy simpáticos :S nunca me dejaron tener uno, y eso que yo gato que veía abandonado, gato que me llevaba a casa y posteriormente le encontraba una familia. Pero nunca me dejaron quedármelo y siempre tenía que aprovechar a hacer esto cuando ellos no estaban en casa por trabajo (viajaban mucho)
El caso es que siempre he tenido una conexión especial con los gatos, por alguna razón inexplicable. Mis padres lo saben. Creo que es el hecho de que nos entendemos perfectamente en cuanto a caracter XD
Pero todo esto ha sido desde siempre.
Recuerdo una vez en Tenerife que estábamos cenando y a mi madre se le derramó un montón de pescado en el suelo y una jauría gatuna se puso debajo de la mesa, a cenar con nosotros. Mi madre casi se sube a la mesa!!! y yo feliz, con mil gatitos en mis piernas. Aunque no me dejaron acariciar a ninguno :S XD
Lo siento, los adoro, gatos, perros... vacas si me apuras... Me gustaría poder hacer más por ellos.
Ni se te ocurra sentirlo, Maggie, ¡faltaría más!
EliminarLlama especialmente la atención esa rebeldía de muchos catlovers (o animalovers, en general) que, como tú, reaccionan a las prohibiciones de la infancia cuando pueden y nos encanta leer que ya rescatabas animalillos necesitados de pequeña, aunque fuera a escondidas...
Por cierto, genial la historia del pescado: la cara de tu madre debió ser todo un poema y la tuya, también ;)
Miau-gracias, guapetona, y ronroneos.
En mi caso me hice catlover poco a poco, sin saberlo... fue un minimo el que me ayudó... así que he votado que unos se hacen y otros nacen pero a la encuesta se podría añadir el apartado o... algun minimo te convence de hacerte catlover!! jaja Abrazos felinos
ResponderEliminarBásicamente o lo eres porque naciste, porque te hiciste o no lo eres, que las encuestas, cuanto más directas, mejor. Los detalles y los mininos que formaron parte de cada historia los queremos con pelos y señales en forma de comentario ;)
Eliminar¡Ronroneos, gatera a fuego lento y sin saberlo!
Yo me hice gatera. Hace 3 años me iba a vivir sola a una ciudad nueva y tenía miedo de estar demasiado sola y adopté a Kaede. Lo que no sabía entonces es que podías sentirte más unida con un gato que a la mayoría de las personas. Desde que la adopté hemos vivido en 3 ciudades, hemos hecho muchos kilómetros juntas, pero da igual dónde vivamos, siempre que esté la Kaede sabré que he vuelto a casa.
ResponderEliminarTambién fue la Kaede la que hizo catlover a mis padres, pero esa historia que la cuenten ellos :)
Es precioso eso que dices, Elena, de que donde esté tu Kaede estará tu hogar. Porque sí, cuando eres catlover sabes que junto a tu gato está tu vida y lo demás son pamplinas.
EliminarRonroneos, gatera hecha y convencida, y mimos para esa Kaede que te convirtió y te hizo unirte al lado gatuno.