Hoy venimos a contaros, queridos lectores, una iniciativa animalista y solidaria que devuelve la esperanza y las ganas de creer. Y es que el grupo alicantino Humanymal, dedicado a las terapias asistidas con animales, ha sacado adelante una campaña a favor de las personas sin hogar y sus mascotas que merece la pena. Bajo el lema "Y para mí lo eres todo" este equipo ha tratado de mostrar al mundo por segundo año consecutivo la situación de invisibilidad del colectivo de los sin techo, especialmente de aquellos que tienen animal de compañía, así como los profundos lazos afectivos que comparten estas personas con sus fieles compañeros peludos. Gracias a la colaboración de clínicas veterinarias, empresas privadas, ONG's, particulares y los alumnos del I.E.S. Canastell, Humanymal ha ofrecido a los animales de las personas sin hogar asistencia veterinaria, alimentación y productos para mascotas, lo cual ha pintado una sonrisa de oreja a oreja en estos humanos con menos recursos económicos pero que adoran a sus bichillos como el que más y desean lo mejor para ellos. ¿Los beneficiados por esta iniciativa? Sobre todo perretes, pero también algunos gatos e incluso roedores.
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| "Personas sin hogar y mascotas 2014" (Copyright de Humanymal) |
Si en cifras la campaña del año pasado fue un éxito (con 33 perros que recibieron asistencia veterinaria, 45 packs de alimentación canina/felina entregados y el reparto de 28 collares antiparasitarios, 47 toallas, 34 mantas y varios abrigos, entre otras cosas) en sentimientos llegó mucho más lejos, al constatarse el maravilloso vínculo que une a la gente sin hogar con sus animales que, al fin y al cabo, son sus amigos, sus camaradas, su familia, esos grandes compañeros de vida que no les juzgan ni por lo que tienen ni por lo que les falta. La buena acogida y los resultados positivos de 2013 dieron pie a una segunda campaña que, a falta de datos concretos, queda resumida en este magnífico vídeo que consideramos importante compartir con todos vosotros para que llegue lo más lejos posible. Quizá os haga llorar como a nuestra humana, pero serán lágrimas de fe en el ser humano y esas siempre merecen la pena.
No queremos despedirnos sin sumarnos a una de las reivindicaciones expuestas por Humanymal a raíz de estas campañas. Y es que hacen falta servicios que admitan el acogimiento de las mascotas junto a las personas sin hogar ya que en los albergues y centros que existen no se permite el acceso con animal de compañía y muchos humanos prefieren dormir en la calle a separarse de sus amigos cuatropatudos. A ver si el año que viene podemos deciros que alguien escuchó esto y tomó cartas en el asunto.
Me llamo Rumbo y soy un gato urbanita que comparte sus experiencias cotidianas y sus reflexiones felinas con todo aquel que quiera leerlas. ¿Os animáis?
Definitivamente este es uno de esos vídeos que yo calificaría como "de llorar", pero es una emoción mezclada con alegría porque, como tú bien dices, hace que recuperemos un poquito la esperanza en las personas.
ResponderEliminarGracias por compartirlo :)
De nada, Gema, que entre tantas desgracias y barbaridades, estos mensajes también merece la pena difundirlos y que nos calen el alma :)
Eliminar¡Ronroneos y lágrimas emocionadas!
Que bonito. Me ha recordado a la historia de Albert y su perro Piedra. Albert era Austriaco y viajó por todo el mundo llevando consigo a su perrillo, en Badajoz estuvo durmiendo en la calle durante un invierno bastante duro porque no le dejaban entrar en los albergues junto a su amigo. Al final se fué a vivir a Plasencia porque se enteró que un centro de allí si le admitían al perro, aunque tendría que dejarlo por las noches en el patio.
ResponderEliminarEn los albergues, incluso en las residencias de ancianos, deberían cambiar las normas y permitir que los usuarios permanezcan junto a sus mascotas, para muchas personas son su familia y es terrible tener que separarse de ellos.
No conocíamos la historia de Albert y Piedra: normal que se fuera a Plasencia si allí le admitían al perrete, ¿no? Y sí, tanto albergues de transeúntes como residencias de ancianos deberían replantearse las cosas, que es muy difícil (por no decir imposible) renunciar y dejar atrás a un amigo de verdad (aunque sea peludo y con cuatro patitas), y en definitiva esto es lo que se le pide a muchas personas a cambio de dormir bajo un techo o de que le cuiden en su tercera edad.
EliminarRonroneos, Kira, y este sería un buen deseo para el 2015 :)
Gracias por el comentario...y feliz 2015!!
ResponderEliminarDe nada, Nemo. Y felinísimo año ;)
EliminarMe encanta esta iniciativa. Separar a una persona de su compañero animal es muy cruel. En una encuesta de 2013 en Alemania el 87% de las 486 residencias para mayores participantes permitían animales y en muchos países se está constatando los beneficios de ello a muchos niveles. Ojalá con el tiempo también en España se les reconozco también su importancia en la vida de muchísimas personas y se crean más facilidades para su integración en aquella. Saludos.
ResponderEliminarEn efecto, Mi Miga: la iniciativa de Humanymal es simplemente maravillosa. Y sí, ojalá logremos que el valor del amor hacia nuestros animales se respete como merece.
EliminarRonroneos y encantados de releerte tras el kitkat navideño :)