jueves, 30 de septiembre de 2010

En pleno salto

Aquí os dejamos, queridos lectores, esta fotografía de Elmo en pleno salto, captada el otro día mientras nuestro pequeño rubiales intentaba escapar del a veces indiscreto objetivo de nuestro humano. Y es que dicen por ahí que fotografiar gatos es, en ocasiones, una tarea complicada, especialmente cuando, como en el caso de Elmito, el modelo no está por la labor de aparecer en la foto. Aunque también es cierto que, en la mayoría de los casos, los resultados de una sesión fotográfica con protagonista felino, aunque inesperados, pueden ser altamente gratificantes (Ejem, ejem...)

lunes, 27 de septiembre de 2010

Cinco lobitos

Hace más o menos un mes os contamos que Elmo había perdido una de sus uñas. ¿Os acordáis? El caso es que al final de la historieta os preguntamos, queridos lectores, si sabíais cuántas uñas tiene un gato: nadie ha dado respuesta a esta cuestión y ese es el motivo por el que hoy venimos nosotros a resolver el misterio.

Utilizándome en esta ocasión a mi mismo como modelo y ejemplo, os diremos que los gatos tenemos cinco dedos en cada una de las patas de delante (como podéis comprobar en mi foto) pero sólo cuatro en cada una de las de detrás, lo que supone un total de dieciocho dedos con sus respectivas uñas, excepciones y accidentes aparte. Curioso, ¿no?

jueves, 23 de septiembre de 2010

Miradas felinas

En la Avenida del Alcalde Lorenzo Carbonell, en uno de los muros perímetrales del recinto del I. E. S. Figueras Pacheco de Alicante, descubrieron hace unos días mis abuelitos humanos por parte de humana este retrato de chica con gato del que ya nos han enviado unas fotos. El caso es que desde hace unos años, este muro se utiliza y reutiliza como lienzo en el que crear y exponer murales de lo más diverso que, con el tiempo, ceden su lugar y su existencia a nuevos artistas y nuevos diseños en un ciclo continuo de arte urbano.

De esta manera os traemos aquí, queridos lectores, una de las últimas obras gestadas dentro de este proyecto museístico al aire libre. Se trata de una composición sencilla y tierna en la que una mujer joven sostiene en brazos a un gato. Chica y felino comparten pose, rasgos y expresión, manteniendo fijas sus miradas felinas en los viandantes y conductores que, conscientes o sin saberlo, pasarán por delante de esta pareja mientras permanezca en el muro.


Firmada por Kiz, esta obra nos gusta, aparte de por el gato, por la delicadeza que transmite. Y es que parece que estamos acostumbrados a un tipo de grafitis muy distintos, más esquemáticos, de trazos más duros, de colores más intensos, viniendo a demostrar este retrato de corte clásico que los diseños realistas y los tonos suves pueden transmitir al espectador urbano tanto como el mural más alternativo.


 

[Junio de 2012] Nos editamos: Esta obra ya no existe al haberse pintado un nuevo mural aprovechando el mismo muro.

jueves, 16 de septiembre de 2010

¿Dónde está el Ratoncito Pérez?

Como ya sabéis los que soléis pasar por nuestra Gatera, hace un par de semanas mi humana me llevó a la clínica veterinaria porque se me movía en exceso uno de esos dientes pequeñitos que tenemos entre los colmillos de la mandíbula inferior. El exagerado vaivén del incisivo no auguraba nada bueno y, efectivamente, en cuanto lo vio mi veterinaria el dictamen fue que lo mejor era sacar la pieza para que no me hiciera más daño en la encía (y es que de tanto moverse, tenía la zona muy enrojecida) Y así, un pequeño tirón terminó con lo que, al parecer, había comenzado con un indeterminado aunque certero buen golpe (Vamos, que en algún momento entre el fin de semana y la revisión de dientes del jueves, me metí un trastazo de categoría. Ejem, ejem...)

Ya sé es que los accidentes ocurren, pero este me ha costado a la tierna edad de seis años uno de mis maravillosos 30 dientes, convirtiéndome en un mellado con todas las letras. Menos mal que los gatos no usamos ni lucimos demasiado los incisivos porque para masticar empleamos los molares y porque, salvo en rarísimas ocasiones, evitamos sonreír por motivos más que obvios si os fijáis un momento en la foto de Noa que acompaña esta entrada. Pequeña e inexperta, fue pillada e inmortalizada en pleno intento de sonrisa felina, siendo el ejemplo perfecto de porqué los gatos no solemos sonreír.

Esta es, a grandes trazos, la historia de mi diente. Poco más hay que añadir al respecto de su pérdida, aunque quiero dedicar un momento a hacer desde este foro una reclamación. Y es que desde la noche del 2 de septiembre estoy esperando pacientemente al conocido como Ratoncito Pérez que debería haber canjeado ya mi pequeño incisivo por un regalo de categoría, consolándome de esa manera después del trance vivido. Pero parece que este roedor ha decidido ignorar mi sufrimiento por motivos que no alcanzo a entender. ¿Será porque soy un gato y a él no le pagan plus de peligrosidad? Pues si esto es así, ya va siendo hora de que el susodicho ratón renegocie sus condiciones laborales, que los felinos también tenemos derecho a sus visitas. ¿O no? En fin...

miércoles, 8 de septiembre de 2010

De 26 a 30

¿Sabíais que los gatos nacemos sin dientes, pasamos a 26 dientes de leche durante los primeros meses y después a 30 piezas permanentes? Así, la diferencia numérica entre una dentadura de gatito y una de gato adulto la marcan los cuatro molares, ausentes en la etapa de leche y que nos salen a partir del cuarto o quinto mes como colofón del cambio de dientes.

En la foto podéis ver a Elmo tratando de ilustrar la entrada con la boca bien abierta. ¿Os animáis a contar? Que conste que yo no he posado en esta ocasión porque ya no soy un buen ejemplo: al final, perdí el diente que se movía... Pero eso ya os lo contaré otro día.

jueves, 2 de septiembre de 2010

¿Conserváis todos los dientes? Encuesta de septiembre

Esta misma mañana, mientras nuestra humana revisaba el estado de nuestras bocas, se ha dado cuenta de que uno de mis incisivos se mueve bastante y este hecho ha propiciado dos cosas. La primera, que dentro de un rato salgamos hacia la clínica veterinaria (esta vez no me escapo...) La segunda, que se nos haya ocurrido la pregunta para nuestra encuesta de septiembre.

Y por eso, lo que nos intriga en esta ocasión es el estado de vuestras sonrisas, queridos lectores de cuatro patas. Así que poneos a contar y decidnos: ¿Conserváis todos los dientes? Y que conste que los de leche no valen, que esos los perdemos todos. Lo que queremos saber es si conserváis todas vuestras piezas permanentes (30 en los gatos y 42 en los perros) o si por cualquier causa (un golpe, una enfermedad, la edad...) habéis perdido alguna. Las respuestas entre las que podréis elegir las vuestras son las siguientes:
  • Tengo una sonrisa completa.
  • Ya se me ha caído uno.
  • He perdido varios.
  • Los he perdido casi todos.
  • Estoy totalmente desdentad@.
  • Pues no tengo ni idea.
  • Aún tengo los dientes de leche.
  • Ninguna de las anteriores.
Como comprenderéis, yo esperaré a votar a mi regreso de la revisión dental (Ejem, ejem...) Pero vosotros no os cortéis y votad cuanto antes, que cuantos más seamos, más interesantes serán los resultados a final de mes.

Resultados a la encuesta de agosto

Como cabía de esperar, las elevadas temperaturas estivales aplatanan a la mayoría de perros y gatos. Y así lo confirman los resultados de la encuesta del mes de agosto que han quedado repartidos de la siguiente manera:

¿El calor te aplatana?
  • , 15 votos (62,5%)
  • No, 5 votos (20,8%)
  • Pues no sabría decirte, 4 votos (16,7%)
Como veis, la respuesta más votada es, con diferencia, el , viniendo a confirmar con cifras que al 62,5% de los lectores de nuestra Gatera les afecta el calor. Y aunque nos alegramos por esos amigos a los que el verano les resulta indiferente, más nos alegramos por haber llegado ya a septiembre y por estar dejando atrás por fin los calurosos días que hemos padecido en agosto.

Sólo nos queda dar mil gracias, como siempre, a los 19 amigos que con sus votos y comentarios han hecho posible una vez más, a pesar del estío, que nuestra sección más cotilla salga adelante.
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