Libros felinos

Estamos seguros de que muchos de vosotros ya sabréis que en La Gatera nos gusta leer, y por eso consideramos el 23 de abril, Día del Libro, una fecha especial para nuestro blog. Para celebrarlo este año con todos vosotros se nos ha ocurrido plantear un juego, una especie de reto que consiste en que cada lector que visite en los próximos días nuestro rinconcito gatuno podría dedicar un ratito a recomendar un título de temática gatuna que nos ayude a componer entre todos una completa biblioteca felina. La autoría, antigüedad o género de la obra nos resulta indiferente, siendo la única condición para formar parte de nuestro particular catálogo que el libro que seleccionéis tenga algo que ver con el mundo felino. ¿Qué? ¿Os animáis?

Para romper el hielo, empezaremos nosotros. Y el título de la obra que queremos recomendar es Félix, Félix de la autora alemana Hanna Johansen; narra las aventuras de un gato pelirrojo que un buen día se lanza a la calle para descubrir el mundo y vivir un sinfín de aventuras. Con maravillosas ilustraciones de la ilustradora suiza Käthi Bhend, este libro encantará particularmente a los amantes de los felinos aunque es recomendable para todos los públicos. La única pega es que se trata de un título difícil de conseguir: nosotros nos hicimos no hace mucho con un ejemplar en muy buen estado a través de una librería de segunda mano, así que si estáis interesados aún podríais conseguir el vuestro sin esperar a próximas aunque inciertas reediciones...

JOHANSEN, H., Félix, Félix, Col. Austral Juvenil, Espasa Calpe-Planeta de Agostini, Barcelona, 1989.

Hecha nuestra recomendación, queridos lectores, quedamos a la espera de las vuestras, como no podía ser de otra manera, ensimismados entre las páginas de algún libro. Como veis, Elmito ya ha estado eligiendo título para pasar el rato y ahora os toca a vosotros animaros a comentar.

De piedra y hierba

Hoy os traemos, queridos lectores, esta simpática foto captada por nuestra abuelita humana en la parcela de una de las tías de nuestra humana hace un par de semanas. En ella podéis observar a un gato y a un ratón que disfrutan impertérritos pero en perfecta armonía de la fresca y verde hierba que les rodea... Un detalle sencillo pero sin duda de lo más felino apto prácticamente para cualquier jardín. Y es que es en las cosas más pequeñas donde suele radicar la diferencia. ¿O no?

Los gatos del 29-M

Con la jornada de huelga general aún fresca en nuestra memoria, hoy os traemos varias pintadas del wild cat o gato negro, símbolo del movimiento anarcosindicalista, que a raíz del 29 de marzo aparecieron en varios puntos a lo largo de la carretera N-340 entre las poblaciones de Elche y Alicante.

Ideologías aparte, la historia de este felino salvaje erigido en símbolo es realmente interesante, viniendo a representar con su lomo arqueado, su pelaje erizado y sus uñas y dientes prestos al ataque al sindicalismo más radical y revolucionario. Y lo cierto es que esta sencilla silueta en evidente postura de guerra lo dice todo sin dejar lugar a interpretaciones alternativas.

Sólo o acompañado por otras figuras, estos gatos monocromos de tamaño pequeño y fiera pose son una muestra más de las tan comunes pintadas a base de plantilla y pintura en espray, resultando las efímeras obras en este caso más atractivas si cabe no por su sencilla factura ni por su diseño atribuido al sindicalista de la primera mitad del S.XX Ralph Chaplin, sino porque tras la felina forma se esconde una intención y un mensaje que, investigando un poco, hemos podido desentrañar.

¡Miaou!

¿Sabíais que los gatos intensificamos la pronunciación de cada una de las letras que componen el MIAOU en función de nuestros objetivos y/o motivaciones? Así, una M intensa expresa necesidad de contacto físico y, por lo tanto, un buen momento para mimos y achuchones. En cambio, una I larga y pronunciada es señal de que algo no va bien, indicando que sentimos dolor, malestar, agobio o angustia. Si la fuerza del maullido recae en la A, deberéis captar que necesitamos algo con urgencia: se trata, por ejemplo, del típico maullido que emitimos mientras nos preparáis una ración de rica latita (Mmmmmm...) Finalmente, la intensificación de la O o de la U viene a significar frustración ante algún objetivo no conseguido, normalmente porque no habréis captado los mensajes relacionados con la M, la I o la A anteriormente descritos. (Ejem, ejem...)

Fue Mildred Moelk, una psicóloga estadounidense, quien en el año 1944 llegó a esta y a otras interesantes conclusiones sobre la vocalización del gato doméstico tras una serie de completos estudios al respecto, siendo en nuestra opinión sorprendente que los trabajos actuales sobre comunicación acústiva felina aún se basen en sus investigaciones.

Para los que queráis descubrir algo más sobre este interesante tema, dejamos aquí la referencia al artículo en el que esta autora recopiló el extensísimo vocabulario felino compuesto por variedad de murmullos, patrones vocales y patrones de intensidad forzada (Casi nada, ¿eh?) que logró clasificar escuchando y estudiando durante casi cinco años los sonidos emitidos entre otros por sus propios gatos, aunque estamos seguros, queridos lectores, de que sin necesidad de leerlo ya sois capaces de entender al menos parte de lo que de vez en cuando queremos contaros, ¿o no?

MOELK, M. "Vocalizing in the house-cat; a phonetic and functional study", American Journal of Psychology, 57, nº 2, 1944, pp. 184-205.

¡Por cierto! Entre los sonidos felinos estudiados por la Dra. Moelk no podía faltar el ronroneo o purr, objeto de nuestra encuesta de este mes. ¡No dejéis de participar!

Gato, bruja y tarot...

Ya se sabe aquello de que frente a las malas energías, nada mejor que la compañía y protección de un gato. Y ese es el motivo por el que, en estos tiempos que corren, hemos decidido despedir el puente de Semana Santa con esta simpática imagen que nuestros humanos han localizado esta misma mañana decorando uno de los puestos del Mercadillo Medieval instalado durante estos días en el centro de Santa Pola. La simpática bruja y su ágil compañero felino, con su divertida pose y sus colores brillantes, transmiten, en nuestra opinión, un más que bien recibido mensaje dinámico, alegre y lleno de energía positiva, siendo el anuncio de la lectura del tarot un elemento anecdótico aunque, por supuesto, opcional.

Viendo a este felino volador en acción ¿encontráis una forma mejor de desear una buena reentrada en el día a día tras el paréntesis vacacional? ¡Ánimo a todos, queridos lectores, y kilos y kilos de buena fortuna!

¿A qué volumen sueles ronronear? Encuesta de abril

Supongo que todos sabréis que el ronroneo es ese sonido felino similar a un suave ronquido que constituye aún hoy, a pesar de los estudios, un pequeño misterio. No se sabe bien cómo se produce, ni tampoco a ciencia cierta lo que significa pero sea como sea, el caso es que cada gato tiene una manera diferente de ronronear. Los hay entusiastas, escandalosos, discretos, silenciosos,... Algunos gatos lo hacen muy a menudo y otros casi nunca. ¿Cuál será vuestro caso? Pues precisamente aquí, en el estilo propio de cada ronroneador, es donde entra en juego nuestra curiosidad gatuna este mes porque lo que queremos descubrir en esta ocasión, queridos lectores felinos, es a qué volumen ronroneáis. ¿Muy alto? ¿A volumen moderado? ¿En un susurro? ¿Ni se oye? Y así, la encuesta de abril de nuestra Gatera queda planteada de esta manera:

¿A qué volumen sueles ronronear?

-¡Exagerado! Para aquellos que soláis ronronear apasionadamente, resultando un sonido alto y claro, casi escandaloso.

-Normal. Para los ronroneadores a volumen estándar, ni demasiado fuerte ni demasiado flojo.

-Discreto. Para aquellos que ronronean pero muy bajito, casi en un susurro...

-Ni se me oye. Este es el caso de esos gatos que no emiten prácticamente ningún sonido al ronronear, notándose sólo que lo hacen si acercáis vuestra mano a su cuello y notáis la vibración.

-No ronroneo. Para aquellos que jamás hayan sido descubiertos emitiendo este singular sonido.

-Ninguna de las anteriores. Como siempre, una opción para los que no se sientan identificados con ninguna de las respuestas sugeridas.

¡Ea! ¡A ronronear se ha dicho! Pero entre ronroneo y ronroneo hacednos el favor de no dejar de pasaros a votar y, si queréis, a compartir con nosotros algún que otro ronroneante comentario. Como siempre, el cuestionario lo encontraréis colgado en la columna de la derecha hasta el día 30 de abril.

Resultados de la encuesta de marzo

Con los primeros compases de abril llega el momento de publicar los resultados de nuestra encuesta de marzo. Y la conclusión a la que llegamos a simple vista ante las cifras es que a la mayoría de nuestros lectores felinos les encanta escarbar en sus cajones de arena, llegando un buen número de ellos a ser considerados por sus humanos como auténticos mineros. Con un 37,04% de lectores que se entregan en cuerpo y alma a esta labor y un 22,22% que escarban lo normal, el grupo de excavadores felinos profesionales asciende a un nada despreciable 59,26%, seguidos por aquellos que escarban más o menos según el día (un 18,52%) y los que lo hacen con estilo propio (un 11,11%) Lejos de estos porcentajes queda el grupo de los que no escarban nada (un 7,41%, entre los que se encuentra nuestra Noa) y el de los que no se sienten vinculados con ninguna de las respuestas (un 3,70%) Como siempre, os dejamos los datos para que podáis sacar vuestras propias conclusiones:

¿Te gusta escarbar en el arenero?

Me encanta, 10 votos (37,04%)

Lo normal, 6 votos (22,22%)

¡Puaj! Para nada, 2 votos (7,41%)

Según el día, 5 votos (18,52%)

Sí, pero a mi manera, 3 votos (11,11%)

Ninguna de las anteriores, 1 voto (3,70%)

Y con esto por nuestra parte queda dicho todo y una nueva consulta cerrada. Sólo nos queda invitaros a participar en nuestras próximas encuestas y dar las gracias a todos los lectores que han participado con su voto o como Anónimo, Opiniones Incorrectas, Ix, Gema, Gatos y Gatunos, Okinawa y Carmen con entretenidos comentarios.